miércoles, 8 de septiembre de 2010

Te miran mal

En el camino espiritual, sobre todo cuando llevas recorrido una parte y has llegado a comprender ciertos conceptos, te vas a encontrar con mucha gente que te va a dar de lado, se va a burlar de ti y te va a tomar por loco o alucinado, también por beato o religioso, incluso de sectario.
Una de las razones es que al usar las Medicinas de la selva vas teniendo conciencia del daño que producen algunos de tus vicios, pensamientos, palabras, actitudes y actividades, tanto a ti mismo, como al prójimo y al planeta. Eso también extrapolado al resto de la humanidad que comparte dichos habitos. Esto te lleva según te vas concienciando a abandonar ciertos habitos, por ejemplo el de beber alcohol. Ahí empiezan los problemas. 
La gente acostumbrada a verte con una cerveza en la mano o con una copa de licor, se empiezan a extrañar que cuando te la ofrecen se la rechaces, ahí comienzan a verte con cara, de puritano, abstemio (como si fuera algo malo) y aunque puede que no te digan nada directamente entre ellos lo comentan y murmullan, como diciendo que te has vuelto rarito.


El problema no es que tu dejes el alcohol y otros vicios, el problema es que los hace verse reflejados y si bien antes dentro del grupo eras el pedorro y borrachín como forma de ubicarse dentro del grupo y en la vida, pierden esa referencia y en muchos delata su verdadero estado, al no poder ver la paja en el ojo ajeno empiezan a verla en el suyo propio. No sólo a ellos, sino entre los que le rodean que antes se fijaban sólo en lo que tu hacías. Y eso no les suele gustar.

También sucede que dejas de usar expresiones malsonantes, de cagarte en lo más alto y en general dejas de usar blasfemias, improperios o expresiones mal sonantes en tu bocabulario.
Respecto al sexo, ahí si que es terrible, mientras el resto se desviven viendo quien bate el record de relaciones esporádicas, quien es el más promiscuo, quien es más infiel a su pareja o quien es el más "liberado" sexualmente. Defienden la pornografía como arte y admiten el frecuentar los prostíbulos como practica valida. Mientras tu estas despreocupado de todo eso, no tienes prisa, no tienes como objetivo el tener más relaciones sexuales que el de al lado y no le das esa importancia que los otros le dan, como forma de reafirmación o señal de éxito.

El sexo dicen que relaja y que quien lo practica goza de buen carácter, alegría plenitud. Sólo hay que ver lo amargados que están algunos que tanto presumen, lo que te lleva a la conclusión que bien esa afirmación es falsa o el sexo que practican es de muy mala calidad, lo que resulta más frustrante por mucho que lo practiquen que la pura abstención. Normalmente calidad y cantidad no van juntos. En general la mayoría de esos supuestos éxitos, son ficticios, sólo de pico.

Pero lo pero es cuando empiezas a usar palabras cuyo significado nunca han experimentado, alguna vez la han utilizado, saben lo que significa en el diccionario, alguno incluso hace como que lo conoce, pero nunca en profundidad, por propia experiencia, empíricamente de primera mano y a nivel intuitivo, no como simple vocablo o concepto. Hablar de Dios. Palabras como: celestial, bendito, divino, sagrado, ancestral y otras tantas similares, generalmente mal utilizadas y comprendidas. En su desconocimiento, rechazan esas palabras, es comprensible por el daño que ha producido la Iglesia Cristiana y el resto de las religiones en la programación inducida en sus cerebros. Incluso la palabra espiritual la comprenden mal y la confunden con religioso. En ese sentido tienen cierta justificación y perdón. Pero en vez de tratar de comprender te atacan, uniendo eso a tu verdadera liberación sexual, en el sentido de estar libre de las cadenas del sexo y la competitividad implícita en ese campo, para tratarte de cura, santurrón, religioso, beato o sectario. Hay que tener cuidado y en algunos casos evitar utilizar esas expresiones o hacer ciertos comentarios según a quien.
mejor dejarlos que la ignorancia es muy atrevida y en algunos casos se ponen incluso muy agresivos.

Pero lo pero viene cuando a pesar de sus juicios y prejuicios te ven resplandeciente, sano, con buen color, lleno de dicha, calmado, seguro de ti mismo, despreocupado y sobre todo sonriente. Cuando a pesar de sus  risas burlas y rechazos a ti te da lo mismo. Cuando los dejas estar en su ceguera y te la sopla lo que digan de ti, lo que piensen y todo lo que en algunas ocasiones hacen para que sientas que estas, confundido, equivocado, tonto o loco. Cuando te ven que no sufres por las cosas ridículas, anhelos y pequeños dramas humanos que a ellos tanto parecen afectarles, les parecen tan graves, serios e importantes. Si por ello te guiaras y ante su actitud estarías hundido, que ese es su objetivo, pero resulta que no es así y tu sigues por tu camino tan alegre y confiado en estar haciéndolo bien. La ignorancia es atrevida, la envidia malisima.

Por eso os recomiendo que me hagáis caso, no os dejéis desviar, confundir engañar o dudar. Lo estamos haciendo bien, el que quiera que lo vea y actué en consecuencia, el que no que disfrute de sus particulares artificios, pero que te dejen en paz. A la hora de la verdad tengo claro quien vive en realidad algo ficticio. Y no soy yo.

0 comentarios:

Publicar un comentario

 

Jamendadas

El Cornezuelo

Rincon del cannabicultor

Cancionero de Ramón Peregrino

COPYLEFT2009 Mistertrufa